¿Un arquitecto desprecia la tierra sobre la cual tiene la intención de erigir su construcción?
¿Podía Newton despreciar Descartes del cual el utilizaba el método? ¿Hubiera podido Einstein construir su teoría de la relatividad sin haberse apoyado sobre la gravitación newtoniana? *** Renan escribió que los verdaderos hombres del progreso son aquellos cuyo punto de partida es el profundo respeto del pasado. *** Pero no hagamos la divinización del pasado eso seria una cristalización en nuestro pasado. Respetemos el pasado sin rendirle un culto intolerable. *** Veneremos Aristóteles, pero no veneremos el vacío. Veneremos Newton, pero reconociendo que seria insuficiente sin el complemento de la teoría de Einstein. *** Y todo eso para iluminar el futuro y el avance de las teorías que van adaptándose al futuro. |
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Doctora E. Graciela Pioton-Cimetti
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No quise abordar antes este tema. Luego esperé la llegada del año nuevo para hacerlo.
Estoy en la casa de mi hija el primer día del año 2017. Un silencio bienvenido me acompaña. Había decidido poner un capítulo de Nicanor (un libro que dediqué a mi nieto de la Patagonia. Yo lo haré pero ese libro autobiográfico hace referencia a mi vida hasta el año 1978. Es entonces un pasado lejano. Muchas cosas ocurrieron después que deseo trabajar. *** Con toda inocencia partí de Argentina para vivir en Francia ese año el gran amor de mi vida y para toda la vida Constaté que creía a la eternidad sobre la tierra, una eternidad hecha de cada día de esa relación idílica. Los 38 últimos anos de mi vida los pasé en Francia. Como antes en Argentina mi éxito rotundo fue profesional y puedo constatar que como yo siempre digo "si tu cuadro del presente se parece a tu cuadro del pasado no se tiene futuro". Profesionalmente evolucioné positivamente manejando transferencia y contra transferencia mucho mejor. Mi saber enciclopédico ha pasado a ser un arte como dice Jung. Increíble pero comienzo hablando de profesión, como si dijese que es lo más importante. Mi hijo mayor me decía al respecto que ella me tomaba mucho espacio. Tenía razón pero en este nivel no hay traición. Se trata de hacer todo lo mejor posible. *** Digo siempre y considero que: « dejar venir, contemplar, comprender y solo más tarde interpretar ». Es lo más importante. Además yo no dejo nunca nada para hacerlo al día siguiente y la pereza no me toca ni me invade. *** Vamos ahora al plano de mi vida afectiva. Digo como Amado Nervo "yo aymé fui amado el sol acarició mi frente vida nada te debo vida estamos en paz". Digo esto hoy porque el cuadro de mi presente muestra que cambió con respecto al cuadro de mi pasado cuando yo pedía todo a la vida: un amor eterno con un hombre hecho, con una grande H. Ese hombre lo tuve, leal, sincero, puro, digno de ser amado pero su salud frágil se lo llevó hace 11 años y yo me hundí en la desilusión. Hoy el capítulo: "Amor de un hombre" está cerrado y me cuesta pensar: no más una caricia ó una carta de amor. Algunos meses antes de partir me dedico su foto que decía: "A Graciela el primero y el último único amor de mi vida". El cuadro de mi presente afectivo denuncia una profunda soledad y un renunciamiento. *** Mi vida afectiva se limita a mi familia. A mis hijos que cerca o lejos crecieron. Antes fui una madre amante y educadora no solamente alimenticia porque supe convertirme en madre simbólica y traté a mis hijos en adultos como yo lo era. Tienen sus vidas, que las vivan! Mis amigos son mi riqueza. Mi única esperanza de ternura son mis nietos. *** Hay algo en mi cuadro del presente, algo que falta. Debería aprender a llorar para expresar la falta de ese algo pero no se hacerlo y además siempre buseo soluciones y no complicaciones y por mi cuadro del futuro lo que aparece como excelente realidad evolutiva es mi trabajo, el resto parece difícil de imaginar. A veces la falta de proximidad física parece enfermarme. Yo no he hecho el duelo de la mujer viva que yo fuí. Todo se pasó muy rápido. Nos veremos al primero de enero del 2018. *** Mi presente no se parece a mí pasado pero hoy piezas del rompecabezas que faltan. Pero percibo ya que las piezas que faltan deben estar moviéndose para hacer satisfactorio mi cuadro de vida. Escucho, observo en mi una dinámica que no estaba en mi presente. Espérenme y no olviden mis adquisiciones de vida practica: "Comenzar, continuar, terminar y mantener lo que están haciendo". Volveremos y voy a testimoniar sobre el camino hecho en 2017 el en primero de enero del 2018 sobre los cambios en mi cuadro de vida.
Hecho a Rueil-Malmaison el primero de enero del 2017
y hace mucho frío al exterior y el interior. |
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Doctora E. Graciela Pioton-Cimetti
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"Si quieres conocer el pasado mira el presente, que es su resultado.
Si quieres conocer el futuro mira el presente, que es su causa".
Proverbio japonés.
Dicen quienes dicen que saben que el Pasado es importante porque es cuna de experiencia. Sin embargo sabemos que los humanos somos el único animal con la capacidad de tropezar dos veces (y más) con la misma piedra. ¡Basta con mirar el pasado y nos hallaremos de tropezón y caída! Persistimos en los errores de origen como si se tratara de una efectiva realidad aquella maldición de un dios que nos echó del paraíso por intentar saber. Pero nos fuimos perfeccionando en la práctica de los errores. Propongo la "espectacularización" de la vida (excúsenme por el neologismo de propio cuño) como hilo de Ariadna que nos permita intentar salir del laberinto del transcurrir del tiempo. En el pasado, al descubrir los antiguos que la vida podía ser bastante monótona inventaron el espectáculo. Que es un lugar donde uno observa cómo se representa en tecnicolores lo que nos sucede a diario en blanco y negro o sepia. Para cautivar al público agregaron música instrumental, coros y recitados. Así nacieron el drama y la comedia como representación acentuada de lo mismo que nos ocurre pero con la posibilidad de reírnos o sufrir por otros. Por aquel entonces había relatos que describían situaciones y emociones y hasta pretendían alguna enseñanza o moraleja. Con el devenir se fueron "segmentando" los modos de entretener. Hubo un lugar para el teatro, otro para la música. Los italianos que inventaron muchos espectáculos los amalgamaron nuevamente y nació la ópera. Antes proyectaron justas deportivas inspiradas en los griegos pero con el agregado de violencia porque ya los empresarios estudiosos del mercado de entonces habían descubierto que ésta es uno de los mayores atractivos y que vende. El sexo era el otro pero su implementación masiva llegaría después. Corrieron precipitadamente los siglos y llegó el Presente (y continúa). En el contexto de las siempre permanentes intrigas políticas y comerciales que son la causa de las primeras la "espectacularización" creció de un modo inimaginable. Hace tiempo que sostengo que a las cinco instituciones básicas que se describen históricamente como componentes de la sociedad: política, económica, familiar, religiosa y administración de la violencia se debe agregar por propio peso la "institución lúdica". Porque tiene un ámbito propio, es independiente de las demás instituciones y presenta una enorme variabilidad que atraviesa nuestra vida toda. Pero sólo nos detendremos en el desarrollo de la "espectacularización" como eje de este desarrollo casi balbuceante que nos propone considerar al tiempo y su transcurso, un binomio insoslayable hoy por hoy. El espectáculo es el atractor principal de nuestras vidas. Es masivo, fragmentado, total. Existen representaciones para cada gusto y sentido. Por supuesto que modelados desde centros creadores de opinión pública que nos llevan a pensar cuánto de nuestro pensamiento y o lo que es peor, de nuestras emociones son fabricadas por quienes se arrogan el derecho de diseñarlos. Llámense Hollywood, UEFA, NBA, o como se llamen. En el primer caso nos conducen pedagógicamente a un modo de vivir, un modelo de existir, valores que reverenciar y sentimientos y emociones "pret a porter" que deberemos compartir para no figurar descentrados del universo aceptado. Incluye usos, costumbres, normas sociales, definiciones de lo correcto, sanciones para el desviado. Toda la vida definida en cómo debe ser la vida si aspiramos a realización y éxito. En el segundo caso la espectacularización es todavía más aterradora. Porque en los espectáculos deportivos no existe siquiera el relato. Acciones y reacciones conducen a resultados que resultan absolutamente intrascendentes y sin embargo atraen multitudes enfervorizadas que hasta pelean y en ocasiones matan por la escena que se juega. Supremacías enraizadas en símbolos que son colores y escudos alejados de toda interpretación heráldica posible. Hoy la espectacularización de la vida, en este presente efímero como la hora digital de los relojes, nos propone una nueva obligación: "Figurar". Resulta más importante que se nos vea que estemos. Me explico. La "selfie" ha externalizado nuestra ocasión de estar para obligarnos a mostrar que estamos. Nuestra foto acaba siendo más importante que nuestra mirada. Y nos incluimos en situaciones o paisajes para retratarnos sin descubrir la posibilidad de vivenciar. Una especie de registro catastral de las acciones que se aparta sin duda alguna con la posibilidad de la evocación, la añoranza, la remembranza. Todo aquello para lo cual tenemos un cerebro que desocupamos aceleradamente en este culto de la imagen, la instantaneidad, el espectáculo . Finalmente, si la tendencia de la espectacularización se extiende y universaliza (como marca la tendencia) el Futuro aparecería tan fantasmagórico como la imagen de un televisor. Luz y ausencia de luz definiendo todo. Lo preocupante es que cuando el televisor se apaga y el espectáculo desaparece nos quedaremos mirando los puntos negros en la pantalla iluminada. A menos que
Es el ser de mi ser quien me preocupa
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Eduardo Baleani, maestro de grado, sociólogo
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Cultivamos esta maravillosa festividad en la que la energía crística nos ampara con benevolencia
y luminosidad.
Exploramos en nuestro interior y en nuestro alrededor la confianza de algunas horas comunicadas con la divinidad. Sintamos o no que la divinidad nos habita, la navidad nos invita a crear y recrear mundos compartidos, mundos posibles, alianzas y afectos. Transformamos olvidos y rencores inútiles y el autoconocimiento y la templanza serán nuestros escudos de protección. La dualidad inherente a nuestra humanidad nos apremia a explorar nuestra capacidad creativa. Esa capacidad creativa que anida muchas veces en lugarcitos vírgenes en nuestros corazones y en nuestra personalidad. Así la soledad, la intolerancia, las dificultades de hablar y escuchar lo que nos es extraño nos invita a esculpir una comunidad solidaria. Nuestras creencias nos determinan, pero nuestra flexibilidad para revisarlas y modificarlas, ampliarlas o rejuvenecerlas es la navidad permanente en nuestros corazones para vivir con armonía, con la auto-organización de la libertad y la sinceridad. Lucecitas de colores en el mundo todo, arbolitos musicales y los múltiples regalos que adornan la noche nos depara una reflexión. Seamos audaces. Preparemos con tiempo un ramillete aromático de amor, de paz, de bondad de agradecimiento por ser quienes somos. Porque somos lo mejor de nosotros mismos si comprendemos que el propósito mayor de la existencia del hombre/mujer en la tierra es ser conductores de esa amplia y poderosa energía masculina/femenina del Multiverso al Planeta Tierra y del Planeta Tierra al Multivero. Respondamos con empoderamiento a la pulsación de la incertidumbre, del dolor, de la humillación. Y con gran probabilidad las potencialidades dormidas abrirán sus compuertas para cabalgar caminos y horizontes posibles, diversos e inexplorados y reavivar nuestra maestría interior. Seamos artistas, seamos esos buscadores de la llave maestra de nuestra vida y abramos la puerta a la compasión, a la visión íntegra y certera que nos conduzca siempre a la libertad, a la sanación, y a la concreción de nuestros anhelos y virtudes. Navidad te acunamos, como siempre acunamos el amor. Gracias a todos los que fueron, los que son y los que serán parte de ésta y cada una de mis vidas. |
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Lic. Rut Cohen
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Suelo decir a veces en mis frases armadas que el pasado nos condiciona y el futuro nos da impulso o nos impulsa a la vejez. Es una frase que cada uno la puede interpretar de diferentes modos, como sucede con toda comunicación simbólica que construimos pero al menos para mí tiene un significado profundo y motivador, en el sentido que nos muestra de donde venimos y qué limitaciones tenemos, y nos muestra hacia donde vamos, y ese adonde vamos tiene la particularidad de poder ser elegido.
Las limitaciones son producto de lo que hemos vivido y los valores potenciadores también. No todos somos conscientes del hecho de que a través de las elecciones de nuestros actos podemos cambiar nuestro futuro, y esto es muy real y no una interpretación de la película «El secreto». Me parece interesante otra interpretación cinematográfica como «Si señor» con Jim Carey, al menos allí se muestra una forma concreta y simple de generar un cambio al proponer decir «si» en lugar de no. Lamentablemente la educación que recibimos en forma obligatoria no nos enseña a ser personas que sepamos armar proyectos, ser creativos, aprender a poner manos a la obra y tender siempre a terminar lo que empezamos, nos vaya bien o mal. Sin embargo todas estas son características imprescindibles para todo ser humano que quiera al menos pensar que es dueño de su vida. Lamentablemente vivimos sumidos en la ignorancia. Tanto es así que me atrevo a afirmar que somos los únicos seres que solo saben «comunicarse» y mal con los de su misma especie. El resto de los seres vivos se comunican mejor entre ellos de lo que nos enseñaron a ver. Entonces en consecuencia los ignorantes aislados somos nosotros y no el resto de las especies que vienen hace muchos milenios, y todos sabemos que no es exageración MILENIOS en armonía con la naturaleza y entre ellos. Entonces es lamentable la situación del hombre actual. Está aislado del entorno, de la naturaleza, de sus hermanas especies y entre ellos, pero lo peor de todo, aislado de su verdadera esencia y de su «misión» en la vida que en realidad ni sospecha de qué se trata. Es decir somos seres a la deriva sin proyectos ni sentido de vivir. ¡Un verdadero desperdicio de la naturaleza si creó un ser que no le sirve ni al mundo ni a sí mismo! En fin, es hora de despertar. El pasado me hace pensar en esos milenios de evolución de todas las especies y el hombre en desarrollar un cuerpo casi perfecto, con sentimientos, y muchas otras virtudes y con misiones que deben estar ya que la naturaleza o dios o lo que sea no hace nada en vano y sin sentido. El presente lo tomamos como un desecho que hay que descartar porque hay que estar preparado para el futuro, son muy pocos los momentos en que estamos felices de estar en el aquí y ahora, a mayor parte del tiempo estamos reviviendo hechos del pasado o pensando en el futuro y así se pasan las horas y los días y los años hasta que ya no servimos más para nada. Y el futuro para el humano es motivo de miedo o de esperanza. Eso no lo perdimos todavía, la esperanza. En la esperanza de estar mejor está la poca llama que nos queda para vivir. ¿Ahora qué significa estar mejor? Allí también la educación ignorantizante aplicó todo su poder desorientador. Nos dicen que estar mejor es tener más dinero más casas, más placeres y otras maravillosas propuestas materiales. Errado están. Estar mejor es tener paz, ser feliz sin aditivos materiales, estar con la consciencia despierta (y este concepto permitiría escribir varios libros) y ante todo llegar a una plenitud desconocida por el ser humano, que es la plenitud de haber cumplido su misión. Espero que nos empecemos a dar cuenta de esto y logremos hallar la misión que tenemos encomendadas como hombres más las que nos propongamos nosotros en conexión y comunicación con los demás seres con los que nos toca vivir juntos en este presente. Parece difícil, pero no lo es, basta que un humano se de cuenta de alguna de estas evidencias para que todos tomemos consciencia de ella y nos propongamos un cambio. Debemos dejar de ser seres aislados del resto de las cosas y seres que nos rodean para emprender la tarea común que se nos encomendó. Y esto no es un alegato religioso. Pobre del que no se dé cuenta que hay un plan en todo esto, porque es evidente y está a la vista. Es como el estudio del «lenguaje» de las abejas de Benveniste. A mi modo de ver termina confirmando lo que él pretende negar, que las abejas tienen una forma de comunicación que si bien no es como el lenguaje humano, responde en realidad mejor y es más exacto. Paradojas de la ciencia positivista que por suerte está en plena decadencia |
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Licenciado Alejandro Giosa
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Kronos es el padre de todos los dioses y el que se devora a sus propios hijos.
Los dioses representan las fuerzas de la creación, hija del tiempo, que también será el responsable de su destrucción. Pasado, presente y futuro son, como el tiempo, una ilusión que surge del movimiento de los objetos en el espacio, o sobre sí mismos. Es la condena de Dios sobre su propia creación. El estigma de la vida y la muerte impuestas en un universo que está, en realidad, formado por espíritus inmortales. Porque el Ser no puede dejar de serlo, para él no existe la muerte, el Ser es la eternidad de la vida, sin tiempo. Pero para la Creación, el tiempo es necesario, es la cadena que ata el espíritu a la materia. Sin el tiempo, los espíritus vagarían libres en el universo increado. El tiempo sirve, también, para justificar la evolución. A través del tiempo se aprende, se crece y evoluciona. Raro que en toda la historia y prehistoria conocidas, no se ha visto un solo caso de evolución, sólo extinción o adaptación, recurso de prueba y error. El Cro-magnon no desciende del Neanderthal son dos especies diferentes, el Neanderthal se extinguió, el Cro-Magnon vive hasta hoy. Los leones son criaturas poderosas, igual que los elefantes y los rinocerontes; pero no se adaptan al avance de la civilización se extinguen. En cambio, las ratas, las cucarachas y los mosquitos aprenden a convivir y triunfan. Ya veis que la naturaleza no es selectiva, simplemente se equivoca. El fuerte perece, pero el que tiene más capacidad de reproducción y amplitud en su alimentación, triunfa. Darwin se equivocó también en eso. Es que el universo es algo muy diferente a lo que hemos concebido. Todo lo que vemos es la impresión de partículas electromagnéticas en movimiento, en nuestra retina. Los científicos dicen que pueden ser electrones girando en un núcleo y todos salimos gritando que descubrimos el átomo. El átomo fue descubierto como necesidad filosófica en la antigua Grecia. Demócrito, Leucipo y Epicuro hablaban de él. Sea como fuere, el átomo es la unidad de energía electromagnética en movimiento, que genera la ilusión del tiempo. Pasado y futuro no existen sino como antecedente y proyección, el presente (ver que presente significa presencia) es el momento actual con la consciencia despierta (si está dormida, no lo percibimos). Vivimos, en realidad, sólo el presente, y esta es la forma natural de vida del espíritu increado: el Ser. En el Ser no existe la preocupación del futuro, ni la culpa del pasado. Sólo existe la acción pura.
Guaynabo, Puerto Rico, octubre del 2015
exclusivo para «S.O.S. Psicólogo»
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Juan Carlos Laborde
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Hubo un tiempo pasado, que miramos hacia el futuro, era un tiempo de claridades, de
promesas de ilusiones y aromas de flores tiernas, como lo era nuestra vida. Era un hermoso tiempo,
frágil como la primavera, que termina en un aguacero, abriendo la puerta al verano.
Hay un tiempo de nostalgias, que nos hace mirar atrás, y vivir sobre el recuerdo, historias ya vividas del pasado. Y ahí nos aferramos fuerte, como rocas junto al mar, que el agua va embistiendo, y resisten sin desfallecer ni derrumbarse, Habrá un tiempo en el futuro, en que la vida de los otros, valdrá para nosotros, mucho más que la nuestra. Entonces sabremos con certeza, que llegamos a la madurez, total y absoluta del ser humano. Donde todo con facilidad encajará, el altruismo, la bondad, la verdad. Esa verdad real, la nuestra, la única, la que no admite mentiras ni resquicios. La que nos regalará todo el valor, acumulado de viejos seres humanos, con toda la experiencia de lo vivido. Y en ese momento nos amaremos, con fuerza a nosotros mismos !Y la vida tendrá sentido! todo el sentido de la verdad, y de no habernos mentido nunca. Y crecerá mucho nuestro orgullo, de viejos con su deber cumplido, y la esperanza abierta a todo futuro. Acá les dejo un poema para reflexionar sobre nuestro pasado, presente y futuro de nuestra vida.
Cada pasado que quedo atrás fue un presente Cada presente que se labora el futuro lo controla Pasado presente y futuro en nuestras vidas Son tres que siempre se esperan y nos hacen esperar Cada uno con paciencia le da paso al otro Vivimos en el recuerdo del pasado Vivimos el presente sin mucha importancia Vivimos esperando al futuro al cual no conocemos Y así perdemos nuestro valioso tiempo presente Y luego nos quejamos y nos arrepentimos El pasado quedo atrás El futuro solo vendrá vivamos el hermoso presente con amor, humildad, veracidad, respeto, armonía, perdón servicio desinteresado flexibilidad. |
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Prof. Carla Manrique
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Yo estaba asustada, las manos me transpiraban, y un rato más tarde negué lo que
![]() Pero los hechos estaban y pronto muchas cosas cambiarían. ¿Sería para bien? ¿Sería perjudicial? Mi cabeza explotaba. Tomé la idea en un puño y lo compré y solo faltaba estrenarlo, ya había hecho todo para que se produzca un cambio muy grande. Cuando volví a casa comencé a recordar mi vida anterior, como una suerte de aferrarme a cosas sencillas, despojadas de cualquier volado o color. ¿Cómo podría darme paz pensar en cosas sin color? No tengo la respuesta, porque si de algo estoy segura es que no quiero volver al pasado, pero tal vez sea porque al pasado lo conozco, y puedo seleccionar entre miles de ideas e imágenes, positivas y aún negativas, quedarme en el momento preciso con la idea que busco y eso me da una seguridad inventada. Tan inventada como peligrosa, tan peligrosa como confusa. Porque mi pasado fue así, recuerdos de infancia con padres a mi lado y una adolescencia como la de todos, difícil y preocupante, y luego un matrimonio complejo como un juego de bridge. Entonces estaba asustada y me resultaba fácil y preciso recordar mi casa, el perro, y el día de mi boda y siempre me quedo en "el día de mi boda". Los días transcurrieron intentando yo no pensar y cuando llegó el día de la entrega me sentí tan feliz que parecía una novia el día de su boda. Sí, ese era el sentimiento, pues iba a estrenar algo y con ello estrenaba miles de emociones viejas. Elegí cuidadosamente la vestimenta para el estreno, zapatos y cartera. Fui a la peluquería, manicura y revisé cuidadosamente qué aretes y anillos luciría. Era una novia pronta a estrenar un vestido, sin embargo, si hubo un día infeliz en mi vida, tengo la certeza que fue el día de mi boda. No recuerdo algo más triste. Mi madre estaba insoportablemente nerviosa, mi padre explotaba en celos y yo lucía un triste vestido sin gracia. ¿Por qué lo acepté? No lo sé, pero sí puedo recordar los sentimientos de ese día, las cosas que se dijeron, lo que yo no pude decir ni hacer. A veces sueño que "estoy en un lugar equivocado a la hora equivocada y desnuda y tengo que limpiar por todas partes". El sueño se repite constantemente cuando tengo circunstancias felices que me rodean: - Tuve pesadillas, me duele la cabeza- - Cómo puede ocurrirte si estás viviendo un momento hermoso. Él me lo señala siempre. No tengo forma de borrar esa pesadilla de mi vida, pues no puedo volver el tiempo atrás y corregir los errores, y ponerme un hermoso vestido de novia, calzarme zapatos blancos de tacón y bailar hasta caer desmayada. Yo fui a buscar mi automóvil nuevo como una novia, y así me sentí hasta que tuve que contenerme por miedo a que los demás se dieran cuenta de mis sentimientos no estrenados. Hubiera sido sensacional si hubiera podido gritar ¡soy feliz! En fin, mi boda transcurrió sin pena ni gloria, una fiesta corta; corta como sencilla; sencilla como breve; breve como el tiempo pasado. - Papá ¿bailamos el vals de los novios? - ¡No, qué vamos a bailar si no te casaste por Iglesia! Ese sentimiento duró todo mi matrimonio, para cuando me divorcié, mi padre ya había muerto Tal vez, con el tiempo cuando la compra del automóvil pase al pasado, recordaré ese momento glorioso en que me sentí una novia cuando fui a buscarlo. De las tantas cosas que me enseña la vida, es que el futuro es dudoso, ni verdadero ni falso, y solo tiene el contexto que nuestra imaginación le da. Recuerdo cuando era niña y necesitaba alejarme de alguna circunstancia dolorosa, imaginaba el futuro, cualquier cosa, un paseo, una fiesta o una casa. Dicen que no se puede imaginar lo que no se conoce, pero no estoy de acuerdo, pues mi boda soñada no la tengo, no la tuve y no la tendré y sin embargo, puedo imaginarla, aunque ahora de tanto y tantas veces hacerlo, ya no me interesa. Salí a dar un paseo con el automóvil, aceleré y creo haber escuchado el sonido del automóvil cupé de mi padre. Le encantaba ese sonido y él aceleraba de puro gusto de escucharlo. El presente es así de rápido. O sea, todos los renglones que preceden a éste son pasado, entonces todo es pasado y el futuro inventado. Pasado y presente van juntos de la mano. Es imposible que los separe. Toda acción presente se remonta al pasado, algunas lo corrigen y me devuelven las sensaciones que no tuve, y explotan los deseos reprimidos y eso es el presente para mí. Un tiempo en el cual vivo feliz a pesar de toda circunstancia como cualquier ser humano, pero vivo agradecida a Dios de que el pasado no vuelve y estreno sensaciones viejas, esas que no pude o que no supe cómo hacerlo y quedó guardado en el "cajón del sastre". ¿El futuro? Es tan dudoso como la veracidad de un cuento, pero no es incierto, porque ciertamente algo ocurrirá que cambiará el presente en milésimas de segundo en las que el futuro volverá a ser pasado. De algo estoy muy segura y es que nada quedará como ahora, todo va a cambiar. Las tristezas, los dolores, las alegrías, todo cambia y es bueno verlo así, porque tengo la certeza que siempre, voy a ser cada día más feliz. |
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Silvia Stella, abogada
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